Se trataría de un estudio completo, prestando especial atención a la distribución de los elementos eléctricos (la propia instalación, regletas, torres de ordenador, situación de impresoras, tecnología inalámbrica, etc.) proponiendo soluciones diversas según sea necesario, aconsejando sobre materiales, tecnología adecuada para la protección de las personas, sistemas de iluminación adecuados, protección contra electricidad estática y consejos para que no aparezca, creando un ambiente y aire limpio, agradable y sano, donde el empleado rendirá más porque se encontrará mejor, libre del estrés ambiental.
redes inalámbricas, continua emisión de ondas electromagnéticas
Se han de crear zonas lo más libre posible de cualquier influencia negativa sobre la salud de las personas, lo que en Domobiótica (la domobiótica es la medicina del habitad, y procura conseguir una calidad ambiental cuidando los criterios ecológicos y biológicos de la construcción) se consideran zonas blancas.
¿Qué parámetros se controlan?
Lo que normalmente nos encontramos en las oficinas o centros de trabajo es el síndrome del edificio enfermo (SEE), edificios cuyo clima interior resulta molesto o nocivo para los trabajadores (Desde 1995 el Ministerio de Trabajo reconoce que al menos el 30% de los edificios laborales están enfermos).
- Son edificios herméticos, mal ventilados, con climatización centralizada, muy electrificados y tecnificados, saturados de materiales artificiales.
- Mala calidad del aire (demasiado seco, electrificado y cargado de polvo, polen o químicos tóxicos) lo que muchas veces provoca sensación de ahogo y puede favorecer los casos de rinitis, conjuntivitis, reacciones cutáneas y agravar los episodios de ansiedad, asma o alergias.
- La iluminación artificial producida por tubos fluorescentes en la mayoría de los casos y la falta de luz natural es causa de depresión otoñal (TAE: trastorno afectivo estacional), somnolencia matinal e insomnio, y un factor de riesgo en patologías como fibromialgia o cansancio crónico, no hay que olvidar que pasamos el ochenta porciento de nuestro horario laboral en recintos con poca luz solar y que este tipo de iluminación no contempla el espectro cromático de la luz solar, es mucho menor (lo que produce falsa percepción de los colores, además de un predominio de ondas electromagnéticas que no se encuentran así en la naturaleza), a parte de su luminosidad, la mayoría de las veces insuficiente, produce agotamiento al tener que realizar un mayor esfuerzo para realizar las tareas y al ser luces con reactancia eléctrica producen un parpadeo a la frecuencia eléctrica (50Hz) casi imperceptible a simple vista, pero que el nervio óptico si percibe, generando un deterioro continuo, llegando incluso a producir ataques de epilepsia con el paso del tiempo. La poderosa influencia de la luz en los neurotransmisores cerebrales modifica la atención, el humor y el comportamiento, altera la salud humana y afecta al rendimiento laboral.
- la influencia negativa de las anomalías geológicas del subsuelo, como son las fallas, fisuras geológicas, venas de agua subterráneas, cuevas o cavidades, pueden provocar aluminosis, humedades y grietas y pueden producir múltiples patologías clínicas asociadas, incluso el cáncer.
- La contaminación electromagnética producida por la instalación eléctrica y los aparatos conectados a la misma, las comunicaciones inalámbricas (wifi y telefonía inalámbrica ), nos hacen estar sobrecargados de electricidad, produce agresividad, tensión. El cuerpo humano es una máquina bioeléctrica y el electromagnetismo del entorno produce estrés electromagnético (electroestrés). Nos carga (carga eléctrica corporal) la cercanía de redes eléctricas, ordenadores, electrodomésticos, telecomunicaciones y más sobre suelo aislante, como parquet o calzado sintéticos, ya que modifican la resistencia eléctrica de la piel, afectan al ritmo cerebral y cardíaco, cambian el metabolismo, e incluso alteran la polaridad de la membrana celular. Son causa de Lipoatrofia semicircular, disolución del tejido adiposo sobre todo en piernas, provocando una cavidad en la zona, esto se soluciona corrigiendo o alejándose de la fuente de contaminación (campos eléctricos de baja frecuencia). Hay indicios que señalan que ante una exposición continuada se produce una desmielinización (La vaina de mielina, una grasa, que es el aislante de los nervios), esto es una causa del Parkinson, ya que dificulta la señal eléctrica a los músculos y como se puede comprobar por resonancia magnética una posible causa del Alzheimer, cuyo primer síntoma es la desmielinización.
- Un ambiente eléctrico equilibrado, comprobando la proporción de iones negativos en el aire, que es un factor determinante en la calidad del aire del interior de las oficinas, donde pasamos hasta el 80% de nuestro tiempo, está saturado de iones positivos, esto es producido por la contaminación ambiental, el aire mal acondicionado, ordenadores y aparatos eléctricos (electrodomésticos). Esto es con frecuencia causa de problemas respiratorios como rinitis, asma y alergias, especialmente en las personas hipersensibles.
- Electricidad estática, corrigiéndola y tomando medidas para que no aparezca, controlando los valores de humedad ambietal, controlando la que la derivación a tierra de los elementos metálicos y componentes eléctricos, ionización del aire, etc…
- Posible radiactividad de los materiales de construcción.
- Nivel de ruidos.
SOLUCIONES:
- Mejorar la ventilación (abriendo ventanas, ionizar correctamente el aire)
- Corregir las deficiencias lumínicas (potenciar la luz natural, cambio de luminarias en intensidad y color para un ambiente natural y sano)
- Comprobar la toma de tierra.
- Tomar las medidas adecuadas para eliminar o minimizar lo máximo posible los efectos de los campos electromagnéticos de baja y alta frecuencia, que muchas veces con una redistribución de los elementos y optando por tecnología por cable se solucionan.
- Dentro de las posibilidades espaciales y estructurales, aplicar el Feng Shui mejorando la calidad vibracional de la oficina.